El entrenador del equipo femenino de seven de China, Sean Horan, cree que el haber clasificado a los Juegos Olímpicos, ha hecho que el país conozca el rugby.
Sean Horan sostuvo que “China se está despertando al rugby”, a partir de la clasificación a los Juegos Olímpico de Tokio 2020.
El head coach planificó la victoria China en el Asia Rugby Women’s Sevens en Guangzhou en noviembre, donde el equipo ganó sus cinco partidos, incluyendo la final ante Hong Kong por 33 a 0.
Habiendo perdido la posibilidad de estar en Rio 2016, la clasificación generó una enorme celebración, hecho que estuvo cubierto por el canal estatal CCTV.
Horan y China competirán como el equipo invitación este fin de semana en el Seven de Hamilton – la cuarta etapa del Circuito Mundial 2020 – y el ex entrenador de las Black Ferns Sevens cree que su plantel tiene un equipo promisorio.
“China se está despertando al rugby. La celebración duró dos meses", le contó Horan a World Rugby cuando se le consultó sobre el impacto de la clasificación.
“Las jugadoras están comenzando a confiar en ellas mismas y eso era de las barreras más grandes que tuvimos que quebrar - que tuvieran más confianza. Y esa confianza está dada en que si hacemos las cosas bien, si somos pacientes, que si disfrutamos cada día con una sonrisa, amaremos lo que hacemos. Y veo chicas que aman lo que hacen".
“Es duro para ellas porque están fuera de casa durante mucho tiempo, pero al amar lo que hacen, lo hacen con una sonrisa y ese es el principal cambio - las sonrisas, las risas".
APRENDIZAJE
China pasó las últimas cuatro semanas en Nueva Zelanda preparándose para el torneo en Hamilton. El plantel completo pasó las navidades con Horan y su familia en Tauranga.
En este tiempo, el equipo tuvo sesiones de entrenamiento junto a las Black Ferns Sevens y Brasil, hecho que será clave de cara a los Juegos Olímpicos.
“Tuvimos la suerte de que tengo buena relación con el equipo neozelandés", a quien Horan condujo a ganar tres títulos de la serie: una Rugby World Cup Sevens y la medalla de plata olímpica durante su época al frente del equipo.
“Vinimos a jugar con ellas en octubre antes del clasificatorio olímpico y nos ganaron, dándonos una dura lección. Esto fue fantástico porque nos dio suficiente para pensar, para reflexionar sobre que clase de equipo queríamos ser. Creo que fue un punto de quiebre para las jugadoras, algo muy bueno de poder ver. Ellas mismas entendieron y decidieron qué querían ser. Eso nos ayudó en la clasificación".
ASPIRANDO A SER MEJORES
Tan solo dos de las doce jugadoras que jugaron para China en Biarritz en junio del 2019 - la última participación en el circuito -, siguen en el plantel de Hamilton.
Horan combina su plantel con nuevas jugadoras y otras veteranas que regresan en la búsqueda del neozelandés para que haya un programa sólido, capaz de ponerlos nuevamente como equipo fijo del circuito.
Si el plan funciona, Horan cree que el objetivo se logrará en los próximos cinco a diez años.
“Cada día aspiramos ser mejores. Será un camino para nosotros, no esperen que aparezcamos de la nada por arte de magia", dijo.
“Confío en el equipo que tenemos, en el staff y en el programa que estamos intentando establecer en China. Si hacemos las cosas bien, si en los próximos cuatro o cinco años seguimos en la misma trayectoria, nos irá bien".
Las jugadoras chinas apoyarán en Hamilton a la Pink Ribbon Foundation, una fundación que lucha contra el cáncer de mama, usando una camiseta especialmente diseñada.
“Estamos tratando de cambiar opiniones tanto dentro como fuera del campo de juego," dijo Horan. “Somos el equipo femenino que representa un país que está buscando inspirar un cambio y creo que esa es la mejor manera de presentar quienes somos. Aprovechamos entonces estar en el gran escenario internacional para poder mostrar y apoyar la fundación, que hace un fantástico trabajo. En algún punto, todos en el mundo están afectados por el cáncer y esta es nuestra manera de demostrar el apoyo”.
Fuente: Gentileza World Rugby.