Nueva Zelanda se encuentra en el cuarto puesto del ranking mundial de la World Rugby, la peor ubicación en su historia y debe ganar para demostrar que la mística de los All Blacks se mantiene viva.
Nueva Zelanda e Irlanda se enfrentan este sábado en la madrugada de Argentina para definir quién se queda con una apasionante serie en la que los All Blacks se quedaron con el primer partido e Irlanda con el segundo Test, disputado en Dunedin.
Sin embargo, este último partido de la serie entre ambos seleccionados no solo será importante para que los de negro no pierden por segunda vez consecutiva en su casa sino que además, servirá para devolverle la confianza a un equipo que ha tropezado con bastantes piedras en la era Ian Foster, claro está, tropezones que eran inesperados para un equipo como Nueva Zelanda.
El ciclo de este entrenador comenzó con un empate ante Australia seguido de dos derrotas consecutivas por primera vez en más de una década cuando cayó ante Australia y ante Los Pumas en 2020.
Posteriormente, en 2021, Nueva Zelanda perdió ante Francia por primera vez desde 2009 y la semana pasada cosechó su primera derrota ante Irlanda en condición de local jugando en un estadio que era una fortaleza para los All Blacks, ya que nunca habían perdido jugando en casa de Highlanders.
Además, el partido que quedó a favor de Irlanda por 23 a 12 fue la primera derrota en casa para los All Blacks desde 2018, lo que dejó mucha preocupación en los fanáticos, ya que por si fuera poco, el seleccionado europeo dominó las acciones del partido a gusto.
Otro aspecto que generó mucha preocupación y ruido en Nueva Zelanda fue el descenso al cuarto puesto del ranking mundial, cosa que para muchos seleccionados sería un hito impresionante, pero no para los All Blacks, que están en la peor ubicación de su historia y probablemente atravesando el peor momento en cuanto a resultados desde el inicio del profesionalismo en el rugby.
Ian Foster tiene un 69,9% de efectividad en victorias y claro, para cualquier otro seleccionado del mundo sería un número genial, pero en Nueva Zelanda, donde solo hay dos entrenadores con menos de 70% de efectividad en todas la historia, genera preocupación.
De todas formas, los All Blacks mantienen su escencia y tienen un plantel plagado de estrellas que están atravesando un gran momento en su carrera y tendrán la oportunidad de tomarse revancha este sábado ante Irlanda en el Sky Stadium.
Así lo sienten los jugadores, Jordie Barrett dijo "Ahora nos toca responder. Creemos que muchas cosas están bajo nuestro control y que podemos influir en este partido. Pero eso no es todo, tenemos que poner el rendimiento en el campo y hacer el trabajo porque no va a ser fácil.
"No hay que esconderse. Hubo mucha decepción el sábado por la noche y el domingo por la mañana, e incluso se filtró hasta el lunes, pero es una semana nueva, una oportunidad emocionante, un partido decisivo contra un equipo de calidad, por lo que hay algunas caras y estados de ánimo positivos en el campamento en este momento, así que estamos listos para ir.
"No tenemos una segunda oportunidad esta semana, así que eso es lo que han hecho los chicos esta semana. Se han mirado bien en el espejo y se han ido a trabajar en las habilidades que tenemos que desplegar y poner en Irlanda este fin de semana"
Para el tercer partido de la serie, Ian Foster seleccionó a los siguientes jugadores:
Titulares:
1. George Bower (13)
2. Codie Taylor (68)
3. Nepo Laulala (40)
4. Brodie Retallick (94)
5. Samuel Whitelock (133)
6. Scott Barrett (50)
7. Sam Cane (C) (79)
8. Ardie Savea (61)
9. Aaron Smith (104)
10. Beauden Barrett (103)
11. Sevu Reece (19)
12. David Havili (15)
13. Rieko Ioane (49)
14. Will Jordan (14)
15. Jordie Barrett (38)
Suplentes:
16. Dane Coles (80)
17. Aidan Ross (1)
18. Ofa Tu’ungafasi (46)
19. Akira Ioane (13)
20. Dalton Papalii (14)
21. Folau Fakatava (1)
22. Richie Mo’unga (33)
23. Roger Tuivasa-Sheck (Sin caps)
*Entre paréntesis la cantidad de partidos
Fuente: Bautista Terrera