A la espera de que se estabilice la pandemia, el Consejo de la URBA diseñó un plan estratégico para la vuelta a las canchas con los debidos protocolos para que se autorice la actividad.
Teniendo en cuenta la cantidad de jurisdicciones involucradas que podrían significar tiempos distintos para la normalización de las actividades, la URBA trabajó en un plan para el desarrollo de torneos alternativos a los planificados originalmente con la premisa clara que cualquier torneo que se dispute se hará bajo igualdad de condiciones.
Por eso el Consejo Directivo solicitará a la Comisión de Competencias que organice los mismos sin descensos de categorías.
Para el supuesto caso que resulte imposible lograr dicha igualdad de condiciones, programarán los encuentros bajo los parámetros que las circunstancias del momento les permitan con el objetivo principal de llevar a cabo una sana competencia para que los jugadores y los Clubes retornen a su vida normal.
El objetivo principal del Consejo Directivo es lograr la vuelta a la competencia a la mayor brevedad posible sin dejar de lado la seguridad de todos los involucrados, pero convencidos que este año podrán volver a las canchas de rugby.
Una vez que finalicen las medidas implementadas en el último decreto y se puedan reiniciar las actividades, la URBA les solicita a los clubes volver a llevar a cabo los entrenamientos con el cuidado y los protocolos sanitarios en vigencia.
Solo resta esperar a que bajen la cantidad de casos para que el Gobierno autorice la vuelta a las canchas que es lo que el mundo del rugby espera ansioso.