Tras casi tres meses, el rugby volvió a tener actividad. En un partido vibrante, la franquicia de Dunedin venció a Chiefs por 28 a 27 en la primera fecha del Súper Rugby Aotearoa. En un primer tiempo parejo, el local se fue arriba al descanso en el marcador por 22 a 16 producto de tres tries, en manos de Dixon, Tomkinson y Mikaele, y un penal convertido por Hunt. Por el lado de la visita, McKenzie mantuvo en partido a su equipo con su gran efectividad a los palos (tres penales convertidos) y un try apoyado por Wainui.En el complemento, el local estiró la ventaja nuevamente en los pies de Hunt, pero visita se pondría a tan solo un punto por debajo en el score producto de un penal de McKenzie y un try de Lienert-Brown (25 a 24). La emoción llegó sobre el final del partido. En el minuto 78, McKenzie anotó un drop para poner al frente a su equipo por 27 a 25 y comenzar a sentenciar el encuentro. No obstante, Highlanders recuperó la salida y con un drop en los pies de Gatland, hijo del entrenador Warren Gatland, Head Coach de Chiefs, se llevó la victoria por 28 a 27 y desató el festejo de toda la gente. Fotógrafo: Sanzaar