Con una actuación excepcional, sin darle ninguna oportunidad al equipo local y con rendimientos individuales y colectivos superlativos, Los Pumas 7s superaron a Australia 7s por 41 a 5 y se llevaron el primer título en esta temporada con el que además alcanzaron la punta del torneo.
Convicción, paciencia y juego asociado.
Esas fueron las claves de la final, para llevarse un partido desde el minuto 0 al 14. El partido decisivo comenzó con una larga secuencia de casi dos minutos sin sacarse diferencias.
Con paciencia y decisión, los argentinos movieron la pelota por todo el ancho de la cancha para anotar la primera definición, con el sello de Marcos "el Rayo" Moneta (7-0) luego de un quiebre inicial de Santiago "Toto" Mare en la acción previa.
En la salida y gracias a una recuperación en el aire de Santi Álvarez, llegó "la Topadora", Lucho González, para apoyar el segundo (12-0).
Con 1.55m por jugarse y en la reanudación de la segunda conquista llegó otra gran recuperación de la pelota, esta vez por otra enorme presión de Álvarez. Los Pumas 7s jugaron un scrum, pero se perdieron el tercer try cuando la defensa local marcó al borde del knock-on.
Quedaba la última pelota, y los argentinos robaron un scrum, recuperaron la posesión y abrieron a la punta para una nueva conquista, esta vez del siempre atento Santiago Álvarez (17-0).
La segunda parte siguió con la misma tendencia. Dominio absoluto de Los Pumas 7s, gracias al control, posesión y buena circulación.
Así Lucho González conquistó el cuarto try (22-0). El partido era perfecto, además entre Wade y Graziano hicieron otra jugada de galera y bastón, para que Matteo logre el primero de sus tres tries (29-0).
Australia era una pila de nervios y el cansancio del partido frente a Sudáfrica le pasaba la factura. Errores no forzados y cesión de posesión ante cada reanudación del juego. Un combo letal para el equipo de Santiago Gómez Cora, que en Perth fue conducido por Leo Gravano y Martín Gaitán.
Los locales descontaron ante el primer error argentino, para poner con el debutante Handley Tonga el 29 a 5, pero eso no hizo mella en la moral argentina. Con 3 minutos por jugarse Matteo Graziano sentenció la final, con otro try memorable, construido junto a su amigo-socio Agustín Fraga. (36-5). Y enseguida llegó el tercero del hombre de Los Matreros, que sentenció otra final de ensueño.
La Argentina se llevó otra corona en el Circuito Mundial, la décima, con un 41 a 5 y ante el equipo local, al igual que la temporada pasada.
Volver, resiliencia, jugar por el otro, con Gómez Cora, ayudando como siempre, instalado en un hotel para seguir el ritmo de sus muchachos desde nuestro país, emocionado y orgulloso con esta nueva, espectacular, conmovedora y emocionante medalla conseguida por "la familia".
Mare, Lucho González, Graziano, Moneta, Pellandini, Wade, Álvarez, los ingresos de Zangara, Pueyrredón y Elizalde. Una actuación enorme para el bicampeonato en Perth.
Los Pumas seven recuperaron su mejor cara.
Lo hicieron con una actuación de ensueño, memorable; por el grupo, por ellos mismos y por su entrenador.
Argentina está de pie, con su mejor equipo, sin su conductor en el lugar de los hechos, pero con la misma pasión y confianza que él transmite en cada encuentro. Una victoria que emocionó y que los puso otra vez en los más alto del Circuito Mundial.
Salud Pumas 7s, nadie más que ustedes saben todo lo que cuesta conseguir esto. Un triunfo con juego, pasión y emoción. Bien al estilo argentino.
Fotógrafo: UAR
Fuente: Hernando De Cillia