Fue un 28 de mayo de 2005, el SIC apabullaba a Belgrano Athletic por 81 a 8. El marrón tocaba fondo y quedaba nuevamente afuera del Top 14. Hacía apenas unos pocos meses que el recordado Alejandro Conti había asumido como coach del equipo porteño. Lejos en el tiempo quedaba su último campeonato de 1968 y la primera década de los torneos de la URBA fue olvidable para el equipo de Virrey del Pino. Entre 1996 y 2005 solamente jugó tres ediciones de la máxima categoría (NdR: Top 14 o torneo de 16 equipos en dos zonas) y todas con magros resultados: 1996 (9°), 1997 (14°) y 2002 (13°).
El “Gordo” Conti llegó en 2005 con un proyecto para que el prestigioso equipo fundador volviera a los primeros planos del rugby de Buenos Aires. En 2007, Belgrano clasificó al Top 14 y ya no se ausentó nunca más de esa elite. Con el tiempo, el Marrón ganó protagonismo y alcanzó las semifinales en 2010, 2014 y 2015. Esos años fueron el preludio de la gran temporada de 2016 donde volvió a ser campeón tras 48 años (derrotó a Hindú en la final por 25 a 10). Ese mismo año también alcanzó la final del Nacional de Clubes, que perdió ante elenco de Don Torcuato por 38 a 23.
El campeonato de 2016 llegó de la mano de gente del club, como Guillermo Tramezzani y Francisco, Luis (h.) y Diego Gradín, pero nadie en Virrey del Pino negará que la década de Alejandro Conti al frente de Belgrano (2005-2015) dejó una huella y un estilo de juego que persiste hasta nuestros días.
Conti construyó un equipo con buen juego y recambio en todas sus posiciones, pero fundamentalmente logró conformar un feroz pack de forwards que brilló en las temporadas 2014, 2015 y 2016, con nombres como Benjamín Espinal, Agustín Gómez Di Nardo, Leandro Magneres, Francisco Gorrisen y Mauro y Julián Rebussone. Además del liderazgo del octavo Alejandro “Oso” Galli (récord de presencias en el club) y Francisco Ferronato (try-man del campeón 2016, con 17 conquistas).
Fiel a la escuela zanjera de “Catamarca” Ocampo y “Veco” Villegas, el “Gordo” Conti hizo un culto del buen scrum y el empuje coordinado. Uno de sus mejores ejecutores fue Francisco Ferronato, que aún sigue marcando los tiempos del scrum marrón. Capitán, referente y try-man, Francisco conversó con Rugby Champagne sobre la actualidad de la institución de Virrey del Pino:
- ¿Cómo fue la pretemporada del club?
- Como suele ser en Belgrano, empezamos la primera semana de febrero con cuatro días de entrenamiento semanales. También tuvimos la oportunidad de ir a nuestra sede en Pinazo, ahí tenemos más lugar y una cancha más amplia. Al equipo lo vi bien físicamente. Hoy se da por descontado que uno viene trabajando desde fines de diciembre y enero. Se vio la responsabilidad de todo el plantel para llegar de muy buena forma a febrero. A grandes rasgos, fue una pretemporada muy dura y positiva.
- ¿Jugaron partidos amistosos?
- Solamente contra CUBA. No nos fue bien en el resultado, pero se vieron cosas buenas. Para ser el primer partido del año, había muchas cosas para rescatar y también algunos llamados de atención para lo que venía.
- ¿Cuáles son las bajas de Belgrano para esta temporada?
- Las bajas más sensibles con respecto al equipo que terminó jugando en Primera el año pasado, serían Francisco Gorrisen y Rodrigo Fernández Criado (NdR: firmaron contrato con UAR para Jaguares y Ceibos). Sumale a Tomás Gorrisen, el hermano mayor de Francisco, que jugó mucho en Primera estos últimos años y siempre es una gran rueda de auxilio porque ocupa varios puestos en la tercera línea. Tomás decidió dejar de jugar por este año. Seguro me debo estar olvidando de alguien, pero, a grandes rasgos, te menciono los que terminaron jugando en Primera.
- ¿Quiénes son las altas a seguir?
- Las altas son los jóvenes que vienen de M19, pero no hay que olvidarse de los que vienen laburando en Preintermedia A o B. No va a ser la primera vez que un jugador que el año anterior jugó en las Pre, termine jugado seriamente y a un gran nivel en Primera. En Belgrano no hay nombres. Siempre se baraja y se da nuevo. Todos tenemos que volver a demostrar para hacernos un lugar.
- ¿Cómo están llevando la cuarentena y la suspensión de actividades?
- Respecto de la cuarentena, una semana antes de que se dicte el aislamiento obligatorio, en Belgrano ya no teníamos entrenamiento. El club cerró el viernes anterior. Desde el primer momento nos dieron una rutina individual que se puede hacer en un espacio pequeño. Tampoco necesitás mancuernas ni barras, podemos usar elementos de nuestras casas. Tenemos estímulos diarios de lunes a viernes, cinco por semana. Las rutinas se renuevan semanalmente. Los entrenadores nos pidieron que mandemos videos del laburo a grupos especiales en los que nos dividimos. Nos comunicamos por esos grupos separados y también por el grupo general de What´s App. No hacemos aun análisis de video, pero estamos viendo de implementar otras actividades. Es todo muy virtual, pero tenemos contacto continuo.
- ¿Cuáles son los objetivos de Belgrano para 2020?
- A grandes rasgos, la bajada de línea que el plantel adquirió y siente como propia, es que nuestro objetivo no es de resultado sino de desempeño y de cómo hacemos las cosas. Nos enfocamos más en el camino que en el fin. Obviamente cuando empieza el año, todos queremos ganar y salir campeones, pero entendemos que esta es la manera de lograrlo. Nuestros objetivos pasan por ahí. Por ejemplo, podes cuantificar objetivos del juego como establecer un numero de pelotas de calidad para jugar o pelotas recuperadas que querés tener. Lo enfocamos más por ese lado. Hay objetivos grupales relacionados a los valores que queremos representar. Pero te profundizo los del juego porque son menos íntimos y, además, todos estos años nos sirvieron más los objetivos de desempeño que los de resultados
En 1899, Belgrano Athletic, junto con otras cuatro instituciones, iniciaron el "River Plate Rugby Union Championship". Una aventura que sería precursora de la Unión Argentina de Rugby. De aquellos cinco fundadores, exceptuando al desaparecido Flores Athletic Club, es justamente Belgrano Athletic, el club que más años permaneció en la elite del rugby de Buenos Aires. Los otros tres alternaron algunas etapas en el ascenso, aunque se hicieron presentes recientemente: Atlético de Rosario (2017 y 2019), Lomas Athletic (2018) y Buenos Aires C.R.C (2020).
Belgrano cuenta con 11 campeonatos: 1907, 1910, 1914, 1921, 1936, 1940, 1963, 1966, 1967, 1968 y 2016. El Marrón es el cuarto equipo más ganador de la Unión, solo superado por CASI, SIC y CUBA. De su escuela salieron destacados rugbiers nacionales, como Knox, Cole, Forrester, Gradín, Camardón y Arbizu. Y un poco más acá en el tiempo, Bosch y Cubelli.
El rival es el SIC, el mismo de los 81 puntos en 2005, pero la fecha ahora es 5 de octubre de 2019. En el Club Atlético de San Isidro, ante una gran cantidad de público, Belgrano y SIC terminaban de empatar la final en 19 unidades y jugaban un desempate a primera diferencia. Belgrano lo intentó y el campeonato se le escapó por lo poquito que se desvió el drop de Tomás Rosati. Unos minutos después, el que acertó fue Joaquín Lamas y el SIC salió campeón sin sobrarle mucho más que esos tres puntos definitorios. El fundador sintió una frustración natural, aunque lograron lo más difícil que no sólo es llegar, es saber mantenerse. Semifinalista en 2014, 2015 y 2018; finalista en 2019 y campeón en 2016, el Marrón demostró su vigencia y dejó bien en claro que no bajará los brazos y siempre dará pelea.
Fotógrafo: Fede Lemos - @torcua_photo y Rugby Champagne.
Fuente: Darío Procopio - Rugby Champagne.