El 29 de abril de 1982 nació ASARC, el Atlético San Andrés Rugby Club de Ingeniero Maschwitz. A muy poco de cumplir 40 años de vida, la institución del norte de la Provincia de Buenos Aires no escapa de los vaivenes que viven los clubes por la pandemia y la cuarentena. Sin embargo, no se resisten a cumplir un papel secundario y desde su lugar luchan por volver bien preparados cuando regrese la competencia.
Ubicado en la última categoría del rugby porteño, “el marrón” hace tiempo que quiere dar el salto. El año pasado fueron animadores en la Zona Desarrollo, aunque la aparición de Los Molinos dejó a todos peleando por un segundo escalón. Entonces, para Atlético el objetivo pasó a ser el “repechaje”, lugar que ocuparon luego de una muy buena campaña, con 15 triunfos y sólo cinco derrotas. Los 819 tantos a favor los ubicó como la segunda mejor marca de la división, detrás del campeón que arrasó con más de 1000 puntos.
Pero si hay un nombre que es referencia de Atlético San Andrés, ese es Claudio Acosta, que cumple el doble comando entre presidente y head coach del plantel superior. Él nos contó cómo trabajan como institución y los objetivos que tienen este año relacionado con el ascenso a una categoría superior: “Comenzamos el año trabajando en la infraestructura del club. Teníamos pensado terminar la remodelación de los vestuarios para marzo, pero nos tocó este tema de fuerza mayor que nos dejó con el 90 por ciento de la obra terminada”.
Además, hizo mención a la situación actual y a cómo combatir la pandemia: “Es un momento difícil para todos los clubes porque vamos a tener que contactar de nuevo a los socios y volver a nuclearlos en el club. Realizamos una serie de políticas para mantenernos comunicados a través de diferentes actividades vía Zoom, juegos y grupos de whatsaap, que dieron muy buenos resultados”.
Aprovechar los tiempos para volcarlos positivamente. Así nos comentó Acosta lo que hicieron en tiempos de cuarentena: “De todas las crisis surgen oportunidades. En esta suspensión del torneo pudimos trabajar para tener una organización más prolija de todos los aspectos del club, tanto en la administrativa como en la deportiva. Estamos a full con el rugby femenino y la División Superior. Reformulamos el rugby juvenil para presentar algo más que las dos categorías que veníamos presentado. Estamos afirmando a los veteranos para que el club tenga un ingreso económico adicional y captamos algunos padres de infantiles para que nos ayuden con la organización de los chicos entre ocho y catorce años”.
Las dificultades que tendrán que superar, otro de los desafíos institucionales: “Será muy difícil la vuelta a la actividades, ya que aparte de la pandemia por el coronavirus, estamos en una zona en la que el dengue ocasionó un daño muy importante, ya que nuestro club está muy cerca del río y era imposible entrenar en las tardes por la invasión de mosquitos que había”.
- ¿Cuáles son los objetivos que se trazaron?
- En esta cuarentena fueron trabajar y capacitarnos lo más que pudimos, vía Zoom por los cursos que ofrece la URBA, tanto a nivel dirigencial como deportivo. El año pasado hicimos la capacitación de managers, que fueron muy útiles para tener herramientas en el marketing, publicidad y redes sociales. Esos aspectos son una pata fundamental para la mesa que tratamos de conformar con todas las actividades de desarrollo y difusión.
- ¿Qué mensaje podés dejarle a la gente de tu club?
- Queremos transmitir que nadie puede aflojar, ni en el club ni el rugby. Seguramente se presentarán escenarios de los que no estábamos acostumbrados, pero estoy seguro que en el momento que podamos reencontrarnos en una cancha, tercer tiempo o cuando se vuelva a la actividad, estaremos todos juntos contándonos anécdotas y hablando de rugby.
Atlético, en pleno ascenso
Coco Caterbetti es uno de los entrenadores del plantel superior, que junto a Gustavo “Tati” Varela trabajan para llevar al marrón al certamen de Tercera División. Jugaron dos amistosos en la pretemporada y se preparaban muy bien para el inicio del certamen. Así se lo comentó en charla a Rugby Champagne: “Iniciamos la pretemporada con 60 jugadores y el objetivo puesto en el ascenso. Le ganamos muy bien a Zárate en el segundo partido de preparación y antes de enfrentar a Defensores de Glew, nos agarró la cuarentena. Ahí diagramamos todo para mantenernos comunicados con los jugadores. Pudimos repartir las barras y mancuernas entre los que vivían más cerca, para que sigan entrenando y se mantuvieran en forma. Actualmente hacen la rutina en grupo los días de entrenamiento porque tenemos que estar listos para cuando se reanuden los torneos”.
Chiara Díaz Castro es capitán del equipo femenino que también mencionó cómo iniciaron el 2020: “Arrancamos la pretemporada en enero cerca de 25 chicas. Seguimos en contacto por un grupo de whats app, donde nos enviamos la rutina de la preparación física. Nos conectamos vía Zoom para hablar del reglamento y de rugby, con la idea de entrenar todas juntas y tratar de llevar este momento de la mejor manera”.
Y entre los juveniles fue Rubén Vera, el coordinador, quién destacó todo lo que hacen por sumar más y más jugadores al club: “Este año tendremos dos juveniles e infantiles, y estamos esperando que todo esto pase para seguir trabajando y captar más chicos”.
Atlético San Andrés es otro de los clubes de la URBA que lucha desde su lugar por crecer en el juego y en lo institucional. Con objetivos bien grandes, espera que la pandemia y el dengue dejen de una vez su lugar a la ovalada, lo que seguramente todos sus simpatizantes esperan para poder festejar y gritar a través de lo que entreguen desde la cancha los que vistan la camiseta marrón con franjas amarillas.
El staff 2020
Head coach: Claudio Acosta.
Entrenadores: Carlos Caterbetti y Gustavo “Tati” Varela.
Preparador Físico: Mauro Rodera.
Mánager: Gustavo Sánchez Boy.
Capitán Superior: Juan Dipascuales.
Subcapitán: Rodrigo Molina.
Fotógrafo: Gentileza Prensa ASARC.
Fuente: Hernando De Cillia - Rugby Champagne.