El experimentado wing australiano dijo que no vino a disputar su cuarta Copa del Mundo para hacer amigos y ver qué pasa.
El experimentado wing australiano, Adam Ashley-Cooper, es un ejemplo para sus compañeros y no conoce de licencias a la hora de prepararse para disputar una Copa del Mundo.
A los 35 años de edad, ya está listo para igualar el récord del emblemático George Gregan, con cuatro participaciones en una Copa Mundial de Rugby, y su exigencia sigue siendo la misma que cuando comenzó a participar del rugby de elite.
«Siempre les pido a mis compañeros que den todo lo que tengan, esto me compromete a mí a dar lo mismo. Lo que sucede en el entrenamiento, queda ahí y no hay nada personal con ningún jugador, es una cuestión de ser profesional», subrayó Ashley Cooper, a quien se lo ve en la foto de arriba anotando un try en la RWC 2015.
A su vez, agregó: «Quiero ser positivo y enfocarme en cada detalle para seguir creciendo, seguir siendo competitivo. Y quiero competir rodeado de compañeros a los que pueda ayudar a crecer y mejorar».
A pesar de integrar el plantel con mayor experiencia que tendrán los Wallabies en una Copa del Mundo en toda su historia (1046 caps), Ashley Cooper no le saca la vista a los 18 jóvenes jugadores, incluyendo el wing de 19 años, Jordan Petaia, que aún no ha hecho su debut profesional con Australia. Todos ellos, si quieren llegar lejos, tienen la posibilidad de escuchar algunos consejos para sacar lo mejor de sí en las próximas siete semanas.
«Haber participado de las últimas tres Copa del Mundo, es una cuestión del momento y de crecer partido a partido dando lo mejor de uno», destacó el jugador australiano que tiene 118 caps en su haber.
«Cuando miro hacia atrás y recuerdo cada Copa del Mundo, todo pasa muy rápido. Como jugador ya entrado en años, uno aprende a aprovechar los momentos lo más que se pueda, disfrutar el presente y valorar lo que te ofrece una Copa Mundial de Rugby».
Adam se encuentra jugando justamente en la Top League de Japón para Kobelco Steelers, lo que le significa una experiencia sumamente grata y que le brindó una motivación extra para estar presente en la primera Copa del Mundo que se disputa en Asia. Y a pesar de que algunos cuestionan su actualidad, Ashley Cooper se siente en buena forma para mostrar que está a la altura de una Copa Mundial de Rugby.
«Cada uno tiene derecho a realizar el juicio que quiera, para mí es la oportunidad de demostrar que puedo estar y estoy confiado de la velocidad y el juego que le puedo dar al equipo», expresó. «No me importa la edad que tengo, sé que puedo contribuir y sumar en el grupo».
«Dean Benton, nuestro entrenador de fuerza y acondicionamiento, está feliz en este momento. Si él está contento, yo también», resaltó el wing.
Si Australia avanza hasta las últimas instancias de la Copa del Mundo y Ashley Cooper disputa 6 o más partidos, será el jugador más experimentado de todos los tiempos en una Copa del Mundo. Sin duda que puede llegar a ser un premio más que merecido por todo lo que le dio a este deporte.
Fuente y foto: Gentileza World Rugby.